Medicina Ortomolecular
¿Qué es la medicina ortomolecular?
La Medicina Ortomolecular es una disciplina que tiene como objetivo prevenir y tratar enfermedades, ayudando al cuerpo a mantener el equilibrio bioquímico y metabólico de los micronutrientes, con un absoluto respeto por la biología humana.
El nombre de Medicina Ortomolecular viene de la unión de las palabras orto (correcto) y molécula, por lo que hace referencia a la consecución de la salud promoviendo el equilibrio correcto entre las moléculas que forman el organismo. Se basa en el concepto de que las enfermedades se originan a nivel bioquímico por la alteración del equilibrio entre las diferentes moléculas que integran las células del cuerpo. Éste es el motivo por el que tiene en cuenta la individualidad bioquímica del paciente y por el que integra métodos de diferentes campos de la salud.
Uno de sus precursores de la Medicina Ortomolecular fue el prestigioso bioquímico estadounidense Linus Pauling (1901-1994) quien ha sido una de las pocas personas en recibir dos premios Nobel: el de Química (1954) por su actividad científica y el de la Paz (1962) por su activismo antinuclear. Entre otros campos destacó en la investigación de los enlaces químicos, la biología y genética molecular y las aplicaciones médicas de la suplementación con vitaminas que fue la base de lo que sería la Medicina Ortomolecular.
Ésta concibe el organismo como un conjunto de múltiples reacciones bioquímicas que tienen lugar en las células por lo que, para tener un estado óptimo de salud, estas reacciones necesitan no sólo que se lleven a cabo de forma eficaz, sino también de disponer de las sustancias necesarias para participar en ellas ya sea como sustrato o como facilitadoras.
De este modo, cuando faltan estos nutrientes o cofactores, ya sea por alteraciones genéticas o por no disponer de ellos en cantidades suficientes, van a comenzar a haber reacciones químicas que no se van a producir de forma eficaz por lo que van a acabar derivando en problemas de salud.
Está claro que la alimentación tiene una fuerte influencia sobre la salud del individuo y los niveles adecuados de micronutrientes, que se correlacionan con las propiedades de diferentes alimentos, son esenciales para regular correctamente las vías metabólicas en el cuerpo
Por ello, uno de los pilares del tratamiento en Medicina Ortomolecular es establecer el valor nutricional de cada paciente y la suplementación nutricional mediante el aporte, entre otros, de cantidades adecuadas de vitaminas, minerales, aminoácidos, ácidos grasos, oligoelementos o probióticos, que son indispensables para el organismo y cuya carencia puede traernos serios problemas. Estos pueden darse en forma de suplementos o también a través de una dieta adecuada (Nutrición Ortomolecular). Éste es el motivo por el que se habla de Nutrición y Medicina Ortomolecular y por el que la sociedad científica española, de la que soy consultor, se llama “Sociedad Española de Nutrición y Medicina Ortomolecular (SENMO)”.
Beneficios de la medicina ortomolecular
Lo primero que hacemos en Medicina Ortomolecular es estudiar el historial clínico del paciente, y en función de esta valoración inicial solicitar una serie de pruebas complementarias: estudio de la microbiota y permeabilidad intestinal, de detoxificación hepática, del eje neuroendocrino, de metales pesados, de farmacogenética y medicina genómica, de serología vírica, de tipaje linfocitario, de niveles de vitaminas y minerales en sangre, de estrés o de ácidos orgánicos en orina, entre otros. De esta forma podemos conseguir información para equilibrar los déficits bioquímicos, neutralizar los efectos tóxicos y, en consecuencia, mejorar la calidad de vida de las personas.
Todo esto hace que la Medicina Ortomolecular tenga un gran potencial de desarrollo porque integra métodos de diferentes campos de la medicina. En consecuencia, amplía las posibilidades de que un paciente tenga un diagnóstico certero y lleve adelante un tratamiento exitoso. De hecho, a veces se puede llegar a conocer de forma tan específica dónde está el origen del problema y tratarlo de una forma tan específica e individualizada, ya se habla de Medicina de Precisión.
De esta forma la Medicina Ortomolecular establece tratamientos para corregir un metabolismo alterado, fortalecer el sistema inmune, siendo capaz de abordar con éxito diferentes enfermedades como obesidad, diabetes, trastornos del ánimo, estrés, migrañas, fatiga y cansancio, disfunciones hormonales, alteraciones digestivas, infecciones de repetición o alergias, entre otras
En resumen, la Medicina Ortomolecular es de gran ayuda para mantener el organismo equilibrado y, de esta manera, prevenir y curar distintas enfermedades, pero siempre de la mano de profesionales de la salud que conozcan esta medicina.